Hola a tod@s:
Os veo encendidos con el asunto y lo único que se logra así es quemarse. Yo hace tiempo me di cuenta de que el que no espabila se lo comen y así es la agricultura, como cualquier otro sector. Toda la vida me he criado entre frutales, recogiendo el fruto, envasándolo, y comercializándolo directamente en el mercado mayorista, vamos, que la cadena se cerraba y no tenía a ningún chupón por medio, pero, aun así, hemos tenido que cerrar el negocio y yo ahora, por suerte estoy ejerciendo como périto, y veo otros casos similares, tanto en fruticultura como en cereales, hortícolas, etc. Y la clave está en que aquel agricultor-fruticultor que no se convierta en más de un 50% en empresario no aguantará la presión y desaparecerá.
Así de sencillo es, hay que empezar a hacer cuentas sobre que se va a sembrar,plantar, los gastos que me va a suponer, los beneficios y la rentabilidad, y si no cuadra, no se hace y se busca otra cosa.
Y mejor tomárselo por la vía optimista y moverse que no quedarse pataleando sin hacer nada, esperando a que la subida de los precios nos ahoguen. Que hay que subir el precio, ponganse en sintonía los sindicatos, organizaciones y demás chupópteros, pero eso sí, no lo harán hasta que los agricultores no les presionen en condiciones. Pero mejor actuar primero uno mismo y corregir las pérdidas de nuestro negocio, por que la agricultura no es más que eso, otro negocio.
Un saludo